Con una gran movilización social comunitario, religioso y ambiental, con la participación de cientos de personas, donde la ciudadanía ha mandado un preciso mensaje al gobierno dominicano y a la minera Barrick Gold de que no se identifican con el modelo de desarrollo extractivista y al contrario, han decido defender los bienes naturales, en especial la cuenca del río Ozama y sus afluentes que corren el riesgos a ser impactados.

El proyecto de construir una presa de cola por parte de la empresa minera en la comunidad de Cuance, del municipio Peralvillo de la provincia de Monte Planta ha recibido un no rotundo de las comunidades, y lo más sensato es que la minera extranjera y el gobierno den marcha atrás con el referido proyecto ya que no contara con la licencia social y con la identificación de la población, dado que representa una amenaza a la paz social en las comunidades y a la destrucción del medio natural.

Las voces de rechazos se han manifestado ante las actividades de deforestación que ya la empresa ha empezado a realizar en los territorios y alertan de que la minería es un modelo de apropiación de los recursos naturales y que las industrias extractivas provocan daños irreparables sobre la vida de las personas y los territorios afectados. Por lo cual la lucha de las comunidades, sectores religiosos y ambientalistas se orienta hacia la justicia ambiental para defender las cuencas de los ríos Ozama, Cuance, Cuancita y el Lambedera que representa la presa de cola en Cuance.

Alba López, comunitaria, ambientalista y defensora de los derechos campesinos y de la mujer, expresa su malestar e impotencia ante la intranquilidad que la Barrick y el gobierno han creado desde hace meses en las comunidades y las amenazas constantes e inseguridad a los que son expuestos los dirigentes comunitarios, trae a colación al ejemplo de la líder campesina de Yamasá que murió por la defensa de la tierra y la agricultura familiar, Florinda Soriano, alias, Mamá Tingó, quien cumple un centenario de su nacimiento en el presente año, la cual sirve de ejemplo para la defensa de los territorios y la tierra.

En sus demandas en las calles los defensores ambientales, hombre y mujeres de pueblo, daban testimonios del peligro que representa la minería para el equilibrio ecológico y la producción agrícola de la zona. Se basan los comunitarios de Monte Plata, y de otras localidades del país, en la experiencia dominicana y otros países donde el extractivismo, en nada, ha beneficiado a las comunidades puesto que sólo tiende a destruir el medio natural, cuyas consecuencias se verifican en contaminar el agua, el aire y la tierra; la destrucción ecológica de estos proyectos provocan pérdida de la biodiversidad, contaminación del ambiente y de recursos vitales y fuga de sustancias tóxicas con graves consecuencias sobre la salud de las comunidades afectadas.

¡No a la presa de cola en Cuance!

¡El pueblo tiene derecho a decidir su presente y futuro!

¡Defendamos la madre tierra y la vida de las personas!